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domingo, 10 de mayo de 2015

Los Audiolibros según el Ministerio de Cultura español

Prácticamente coincidiendo con la celebración del día del libro a finales de abril, El Ministerio de Educación, Cultura y Deporte de España publicó dos documentos sobre la industria del libro en España:  la Estadística de la Edición Española de Libros con ISBN de 2014 y el informe El sector del libro en España.

Podeis encontrar ambos documentos en la web del Ministerio aquí y aquí respectivamente, por tanto no voy a repetir aquí lo que vosotros mismos podeis leer de primera mano.

Si voy a hacer algunas consideraciones al respecto de lo que en estos informes se trata sobre los audiolibros.

Si pudieramos resumir en una sola palabra lo que aparece en ellos sobre los audiolibros esta seria: Nada.

Vamos a empezar por el segundo, que es más fácil. La palabra "audiolibro" aparece una sola vez en las 71 páginas que tiene el informe y solo es en referencia al lanzamiento de la plataforma eBiblio (de la que ya hemos hablado aquí y que al respecto a su consideración con los audiolibros hemos aplaudido): "Se trata de una plataforma gratuita de préstamo de libros digitales y audiolibros que ha sido financiada por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte...". Fin. Ya. Vamos que según el Ministerio, en el sector del libro en España los audiolibros no existen.

Si vamos al primero, desgraciadamente nos encontramos con la misma situación, una sola vez aparece la palabra audiolibro en 11 páginas. Al menos esta vez es para ofrecer datos concretos sobre la edición de ellos en el año 2014 y en comparación con el año anterior.

Antes de ir a los datos (será que estoy retrasando lo malo) comentar que en el análisis que distintos medios (online, que son los que miro) hacen de los datos presentados en este informe, los audiolibros son completamente obviados, como si no existieran. Solo aparecen nombrados en el copia-pega de la frase que aparece en el mismo informe.

Y ahora los datos. Recalco que el informe habla de "la Edición Española de Libros con ISBN", es decir solo tiene en consideración para su estadística aquellos títulos que han sido registrados con este número identificador internacional ISBN, registro que no es obligatorio.

En la tabla 14.9 "Libros en soporte distinto de papel inscritos en ISBN por formato" del informe se ve en el apartado "otras ediciones" al respecto de los audiolibros

Audiolibro:
Valores absolutos: Año 2013, 37. Año 2014, 23.
Valores porcentuales (respecto al total de todos los soportes distintos del papel): Año 2013, 0,2. Año 2014, 0,1

Es decir que según este informe se publicaron en el año 2014 en España 23 audiolibros, y lo que es peor descendió respecto al año anterior en 14 unidades (un descenso porcentual brutal).

Honestamente esto no me cuadra con lo que estamos viendo todas las semanas en este blog, en twitter, en las tiendas de audiolibros, etc. Pero por eso quería resaltar antes que esta estadística se refiere exclusivamente a las ediciones registradas en el ISBN. Cierto es que serán las únicas de las que el Ministerio tendrá constancia si no "sale a la calle" a ver que es lo que pasa de verdad, que es lo que yo creo que habría que hacer para tener un pulso más real de que es lo que pasa en el mundo de los audiolibros en España.

En cualquier caso es una referencia que no hay que desdeñar del todo, sobre todo si nos vamos a la base de datos del Ministerio denominada CULTURABase y que es en la que se recogen tanto los datos del informe nombrado como muchos otros anteriores, y que reflejará al menos la evolución de los editores que SI registran por sistema sus audiolibros en el ISBN.
Total de Audiolibros editados con ISBN entre 2000 y 2014 en España. Fuente de datos CULTURABase, elaboración propia.
Porcentaje respecto al total de formatos distintos del papel de audiolibros editados con ISBN entre 2000 y 2014 en España. Fuente de datos CULTURABase, elaboración propia.
Lo que podemos observar de estas gráficas es que desde que empezó la crisis financiera en 2008 la cantidad de ediciones de audiolibros (con ISBN, insistimos) no solo en número absoluto, también en porcentaje respecto al total de formatos distintos de papel lanzados, no ha hecho más que descender de forma absolutamente dramática respecto a los titubeos de las ediciones en el formato audiolibro en España entre 2000 y 2008 (cuando aun el mercado no señalaba claramente que los audiolibros era una apuesta segura y los usuarios no disponían de unos elementos tecnológicos que les facilitaran la escucha de una forma cómoda, es decir los smartphones y demás). Fecha esta 2008 que marca con la compra de Audible por parte de Amazon la explosión del mundo de los audiolibros.

¿Quiere decir esto que al contrario de lo que pasa en el resto del mundo en España el mercado de los audiolibros está a punto de fenecer?¿somos acaso un ecosistema único y sin interacciones con el resto del universo?

Sinceramente no lo creo en absoluto. Lo que si creo es que estos números, por el hecho de tomarse de una forma tan especial, del ISBN, son absolutamente irreales.

¿Una posible interpretación? Las editoriales que antes hacian audiolibros y que los registraban en el ISBN, puede que las que de toda la vida han hecho libros en papel y que tenian en los audiolibros no otra cosa sino experimentos o las que provenian de un mundo "analógico", o han dejado los experimentos para otra ocasión en el caso de las primeras (total nunca creyeron en esto de los audiolibros) o con motivo de la crisis no han aguantado y han desaparecido, caso de las segundas. En contraposición, ¿qué es lo que no está reflejado? sencillamente las ediciones que no se registran en ISBN, obviamente (recordemos que ese registro no es obligatorio) ¿cuáles son estas? pues no se sabe porque no se tienen los datos porque nadie se ha encargado de tomarlos.

Para finalizar (que me está quedando una entrada muy larga) ¿qué es lo que creo que debería hacer el Ministerio para tener una idea más clara de lo que pasa de verdad, al menos en el mundo de los audiolibros? Pues obviamente dejar los canales de datos "oficiales" y arriesgarse a obtener datos reales. Si, supone un esfuerzo pero ¿queremos hacer un trabajo serio o no?. Otra posibilidad: que sea la industria misma la que se encargue de recoger esos datos. Desgraciadamente en España aun no está el mercado tan maduro como para que los editores de audiolibros se reunan entre ellos al menos para hablar de sus preocupaciones o problemas, no ya para hacer estadísticas. Pero todo se andará y soy optimista en que eso pasará, no hay más que olfatear un poco lo que pasa por las redes sociales o las webs de los editores y tiendas de audiolibros en España y en español para ver que no solo 23 es un número absurdo, también para ver que la tendencia no es precisamente la que reflejan los números del Ministerio.

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